Como si se tratara de una escena cinematográfica, un policía que iba a bordo de una motocicleta persiguió a dos delincuentes que se desplazaban en un auto azul, luego de que cometieran un asalto en las inmediaciones del Óvalo Monitor, en el distrito de La Molina.
El efectivo interceptó a los malvivientes y les ordenó detenerse, pero estos se dieron a la fuga, iniciándose así una persecución por las calles del referido distrito. Durante su escape, los asaltantes no dudaron en realizar disparos contra el agente en plena avenida.
La persecución culminó en el cruce de las avenidas Javier Prado y La Molina, donde los delincuentes quedaron bloqueados por el intenso tráfico. Al ver que el agente se acercaba, los maleantes le dispararon a quemarropa.
El policía recibió dos balazos en el pecho, pero salvó de morir gracias a que llevaba su chaleco antibalas.
En tanto, los delincuentes continuaron su huida a pie, arrojando dos celulares y dos auriculares inalámbricos, artículos robados a sus víctimas. Estos maleantes hasta el momento no han sido capturados.