Unas adolescentes en el distrito de Morona, provincia de Dates del Marañón, en la región de Loreto, han experimentado un comportamiento inusual y preocupante después de jugar con una tabla de ouija en su colegio.
Varios de ellos se desmayaron, convulsionaron, gritaron y mostraron agresividad, lo que llevó a sus familiares a buscar ayuda desesperadamente.
Ante esta situación, los familiares llevaron a los jóvenes a una iglesia evangélica, donde el pastor oró por ellos mientras amigos y familiares intentaban calmar su comportamiento descontrolado.
La crisis se prolongó durante varias horas, generando una histeria colectiva en la comunidad.
Profesionales del Hospital San Lorenzo se trasladaron a la zona para brindar atención médica a los catorce menores afectados por este cuadro de histeria.
Aunque aún no se ha determinado la causa exacta de estos episodios, se sospecha que el juego con la tabla de ouija pudo haber desencadenado una reacción psicológica en los adolescentes.
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