Un insólito y alarmante incidente sacudió la mañana de este jueves en San Borja. Un conductor decidió prender fuego a su propia miniván para impedir que la Autoridad de Transporte Urbano (ATU) la trasladara al depósito municipal. El hecho ocurrió alrededor de las 8:30 a.m. en plena avenida Javier Prado, una de las vías más transitadas de Lima.
Según información preliminar, inspectores de la ATU intervinieron la unidad al detectar que operaba como transporte urbano de manera informal. Ante la inminente incautación, el chofer habría desatado el incendio como acto desesperado para evitar perder el vehículo.
Dos unidades del Cuerpo de Bomberos acudieron rápidamente a la zona para controlar las llamas y evitar que el fuego alcanzara otros vehículos o afectara a transeúntes. La densa columna de humo generó alarma entre los vecinos y conductores que circulaban por la zona.
La ATU confirmó que la miniván no contaba con autorización para brindar servicio y denunció que este tipo de actos ponen en riesgo la vida de pasajeros, peatones y autoridades. El organismo adelantó que se iniciarán las acciones legales correspondientes por atentado contra la seguridad pública.
Testigos del hecho aseguraron que el conductor actuó de manera agresiva y que, tras encender la unidad, intentó huir del lugar. La Policía llegó minutos después para identificarlo y recopilar las primeras declaraciones.
El incidente reaviva el debate sobre el transporte informal en Lima y la tensión constante entre fiscalizadores y conductores que operan al margen de la ley. Las investigaciones ya están en curso para determinar responsabilidades y posibles sanciones.
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