El Gobierno de Estados Unidos decidió detener la producción de vacunas contra el COVID-19 de Johnson & Johnson luego de que una mujer muriera y otra se encontrara grave tras ser inmunizadas con dicha dosis.
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Los responsables de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, en inglés) y la Administración de Fármacos y Alimentos (FDA, en inglés) informaron este martes sobre seis personas que tuvieron reacciones adversas tras recibir el inoculante.
El médico Peter Marks, responsable del Centro de Evaluación Biológica e Investigación de la FDA, explicó que se trata de un tipo raro de trombosis cerebral.
A su vez, la subdirectora principal de los CDC, Anne Schuchat, pidió a las personas que se vacunaron con las dosis de dicho laboratorio que estén atentos a cualquier síntoma, sobre todo si tiene problemas para respirar o sienten dolores de cabeza, abdominales o en la pierna. En esos casos recomendó recurrir rápidamente al médico.
Sin embargo, la especialista advirtió que todavía hay pocas evidencias para determinar que las vacunas de Jonhson & Johnson causaron efectivamente esas reacciones adversas.
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Casos similares ya que registraron en varios países de Europa, aunque se debieron a vacunaciones con el inmunizante de AstraZeneca.
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