El retiro de los invasores de Lomo de Corvina no ha sido de forma pacífica. Luego de enfrentarse con los efectivos policiales el miércoles durante casi de 8 horas, al salir de la zona intangible de Villa El Salvador muchos continuaron realizando desmanes en las calles aledañas, incluso quemaron un vehículo que estaba estacionado.
El dueño de ese vehículo es Ismael Reynoso, quien se encuentra en su hogar recuperándose del COVID-19.
“Mis vecinos me avisan a los gritos que se estaba quemando mi carro, entonces salgo desesperado y cuando llegué ya estaba todo envuelto en fuego. Con ese carro trabajo, vivo. No sé quién fue el responsable, no sé quién podría haber sido. He tratado de preguntar a la policía pero no me han querido responder”, señaló Reynoso a Latina.
“El carro es a gas, pudo haber reventado y haber sido peor, una tragedia. Hace 20 días que no salgo por haber estado con COVID-19. Pido a la gente que me ayude, yo mantengo a mi hija, soy padre soltero, pido apoyo, no sé qué hacer, no sé a quién denunciar”, agregó.
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Durante el desalojo de Lomo de Corvina, que dejó tres invasores heridos, varios delincuentes que habían invadido la zona se dedicaron a tirar piedras, incluso afectando las lunas de varias viviendas cercanas.
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