

Redacción Limay
LIMAY.PE
Lima, 12 de November de 2024
Actualizado el 12/11/2024 06:55:37 am
Solo Lozano y Ríos firmaron un acta dando visto bueno a la contratación de la empresa 1190 Sports para negociar la transmisión de los partidos.
Menos de 48 horas después de la detención del presidente de la Federación Peruana de Fútbol (FPF), Agustin Lozano el vicepresidente de la institución, Arturo Ríos Ibáñez, anunció que tomaría su lugar hasta el esclarecimiento de la situación legal del dirigente deportivo.
Ríos lo dijo como si se tratara de un caso ajeno e incidental, cuando en realidad aparece señalado como uno de los 21 componentes de la organización criminal “ Los Galicticos del fútbol” que encabezaba Lozano.
Arturo Ríos Ibáñez, al asumir la conducción de la FPF, declaró: “Voy a pedir a todos los que están investigados, o que sepan que pueden ser investigados, que se presenten a la Fiscalía. Es el momento”. Pero el propio Ibáñez está comprendido en el caso que investiga el fiscal especializado en crimen organizado Juan Orihuela, y lo señala como partícipe en varios de los 14 presuntos actos de corrupción, especialmente en el más grave: la adjudicación a la empresa chilena 1190 Sports para que negocie los derechos de transmisión por televisión de los partidos locales.
El fiscal Orihuela indica en la acusación que Ibáñez sabía que el directivo de la FPF Joel Raffo Olcese es primo del representante de la firma Prisma, Diego Delgado Raffo. Agustín Lozano, Arturo Ibáñez y la directiva aprobaron la contratación de Prisma para que propusiera a una compañía para cederle los derechos de transmisión. Prisma ofreció a 1190 Sports, empresa a la que finalmente Lozano, Ríos y la directiva otorgaron el millonario contrato.