La candidata presidencial de Fuerza Popular, Keiko Fujimori, negó que su bancada esté utilizando la crisis política generada por la vacunación contra el COVID de algunos funcionarios del Gobierno, como el caso de la excanciller Elizabeth Astete, “para intereses subalternos”.
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“Rechazo cualquier intento de utilizar esta crisis para intereses subalternos. Buscar la verdad y aplicar las sanciones a los responsables es indispensable, pero sin afectar el proceso de vacunación", comentó Fujimori en su cuenta de Twitter.
La lideresa de Fuerza Popular calificó de traición el acto cometido por algunas autoridades al aceptar ser parte de ese proceso oculto de inmunización. "Hacerle daño a la vacunación de nuestros ciudadanos es una traición al pueblo peruano”, explicó.
Fujimori consideró como abuso de poder el hecho que el expresidente Martín Vizcarra se haya inmunizado con las dosis de la vacuna china de Sinopharm.
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“Como todos, siento una gran indignación de cómo un expresidente y un grupo de exfuncionarios han abusado de su posición de poder para vacunarse. Candidatos, funcionarios, congresistas y todos quienes tenemos acceso a los medios debemos actuar con mucha responsabilidad. Las vacunas están por encima de cualquier interés político y electoral”, agregó.