¡Atención bodegueros! Entérate cómo les afecta el incremento del Impuesto Selectivo al Consumo que anuncia el gobierno

Si tienes pensado abrir una bodega, es mejor que lo pienses dos veces, ya que la inversión podría ser mayor que la ganancia, más ahora que el gobierno ha anunciado elevar el Impuesto Selectivo al Consumo (ISC) durante este año, un aumento que estaba pendiente desde el 2023, cuando fue postergado para brindar apoyo a las empresas en medio de la preocupación por la llegada del Fenómeno de El Niño (FEN), según indicó, el ministro de Economía y Finanzas, Alex Contreras.

Sin embargo, miles de bodegas y pequeñas tiendas podrían verse seriamente perjudicadas. De acuerdo con el abogado tributarista Leonardo López, si el Ministerio de Economía ajusta los montos fijos del Impuesto Selectivo al Consumo a la inflación del 2022 y 2023, las ventas anuales de las bodegas podrían tener una caída del 4,5%.  “Este tope podría definirse por el promedio entre el mínimo y el máximo del rango meta de inflación definido por el Banco Central de Reserva (BCR) para cada año”, refirió. López explicó en Trome que una medida para frenar el impacto del ajuste del ISC en los pequeños emprendedores sería contemplar solo la inflación del 2023, y no arrastrar la del 2022 como dice la norma, ya que esto implicaría cierres de negocios y desempleos.

“Lamentablemente, las bodegas se verán afectadas porque son quienes llegan a los consumidores finales”, precisó.  Por su parte, el ministro de Economía y Finanzas, Alex Contreras, explicó  “Ha habido una caída muy importante en las cuentas fiscales en el contexto que nos ha tocado enfrentar. Quiero ser muy transparente con los bodegueros, con las pequeñas tienditas; vamos a tomar una decisión que permita equilibrar dos posiciones: no afectar la recuperación de nuestra economía y no afectar los recursos que nuestro Estado designe”, señaló el titular del MEF en una entrevista con TV Perú. 

Hay que precisar que el impuesto selectivo al consumo es una carga tributaria que recae sobre bienes considerados como de lujo como vehículos nuevos, licores, bebidas hidratantes, energéticas, cigarrillos. entre otros. El impuesto además selecciona a otros productos por sus posibles efectos negativos en el ámbito personal, social o medioambiental, buscando desalentar su consumo.