[INFORME] COVID-19: ¿Por qué el Perú tiene escasez de oxígeno medicinal para tratar a sus pacientes?

El Gobierno debe traer toneladas de oxígeno desde Chile y también de Ecuador para cubrir el gran déficit que se ha generado en esta segunda ola de contagios


...

Guillermo Oshiro

LIMAY.PE

Lima, 28 de February de 2021

Actualizado el 28/02/2021 07:24:57 am

Conseguir oxígeno medicinal en el Perú es casi como buscar oro en las calles. La situación ha sido tan terrible que en esta segunda ola de contagios de COVID-19 los cálculos superaron todos los estimados. En enero ya la demanda se había incrementado en 200% y el colapso se refleja en la desesperación de los familiares de pacientes que buscan mantener con vida a sus seres queridos.

Fiesta COVID-19: Más de 30 jóvenes son intervenidos en Surco

Lo irracional de esta situación es que desde el 2017 la Organización Mundial de la Salud (OMS) considera al oxígeno como uno de los medicamentos esenciales, debido a que es necesario para tratar casos críticos de deficiencia respiratoria, como la neumonía e hypoxia. Pese a ello, en el Perú las políticas sanitarias no han considerado esa recomendación como un tema prioritario.

Para conseguir el oxígeno medicinal para tratar a los pacientes, en este caso por el COVID-19, hay dos vías: a través de tus propias plantas o comprar a la empresa privada. En el caso de nuestro país, es evidente que la opción elegida fue depender de los productores y proveedores externos.

En situaciones normales no existe mucho drama porque la producción del sector privado es suficiente para cubrir las necesidades, como sucedía también con las camas UCI. Pero las complicaciones llegan cuando una inesperada pandemia desnuda todas tus deficiencias.

La empresa productora y distribuidora de oxígeno, Linde Perú, por ejemplo, indicó que el incremento en la demanda de oxígeno supera largamente lo que pueden producir. Subir de 200 a 220 toneladas por día es su tope, cuando en promedio se requiere una producción de 250 toneladas. El otro inconveniente que se genera es la falta de balones.

¿Qué hizo el Estado?

Después de la primera ola que debió dejarnos enseñanzas importantes, el sistema sanitario no se reforzó adecuadamente y hoy se sufre incluso más que el año pasado.

El expresidente Martín Vizcarra llegó a expedir un decreto de emergencia, obligando a los operadores a incrementar la producción de oxígeno y anunció una inversión de 28 millones de dólares para crear nuevas plantas. Eso quedó en palabras.

El Gobierno no hizo los trámites necesarios para dotar de plantas de oxígeno en cantidad adecuada para sus hospitales, aunque se sabía que venía una segunda ola”, criticó el doctor Javier Gutiérrez, jefe del Colegio Médico de Arequipa.

Según el ministro de Salud, Óscar Ugarte, el actual Gobierno sí está actuando para corregir errores. “Antes de la pandemia había nueve plantas, ahora son más de 70, es lo que ha comprado el Estado y han donado las empresas”, explicó.

La iniciativa Respira Perú, con el aporte de la empresa privada, logró recaudar más de 3,5 millones de soles que fueron utilizadas para implementar 13 plantas de oxígeno medicinal en nueve regiones: Huánuco (2), Lima (2), Ica (2), Arequipa, Tacna, San Martín, Tingo María, Abancay, Trujillo y Piura. Además de 2.880 respiradores mecánicos.

¿Por qué no implementan más plantas?

Normalmente todo hospital en los países desarrollados tiene su propia planta de oxígeno medicinal. Pero el costo de instalación de una miniplanta, que trabaja con tecnología de adsorción por oscilación de presión (PSA), puede costar entre 350 mil y 400 mil dólares; esa es una inversión tan alta que los gobiernos tercermundistas no estás dispuestos a hacer.

Para el debido funcionamiento se requiere el mantenimiento adecuado, un gasto elevado también. Además, para instalar una planta es necesario contar electricidad permanente, un servicio que no todos los hospitales del país disfrutan.

Por temas económicos y logísticos, tener una planta de oxígeno es un lujo necesario que no es visto como prioridad. Gracias a las empresas privadas, iglesias y apoyos comunitarios en Lima se está cubriendo ese déficit con algunas miniplantas particulares que ofrecen oxígeno gratuito en Puente Piedra, Surquillo y otros distritos de la capital.

Sin embargo, pese a todos los esfuerzos la producción de oxígeno medicinal no llega a cubrir ni por asomo una demanda que obliga a buscar soluciones fuera de nuestras fronteras.

Tenemos tres estrategias complementarias; la primera es ampliar las plantas de oxígeno; la segunda es la importación de oxígeno de Chile; y la tercera es la adquisición de condensadores”, explicó Ugarte.

De Chile empezarán a llegar desde el lunes 40 toneladas semanales, mientras que en paralelo el Gobierno a firmado un acuerdo con Southern Perú para que produzca en su planta de Ilo 20 toneladas diarias que serán distribuidos en los distintos hospitales del país.

A su vez, el proyecto Legado de los Juegos Panamericanos Lima 2019 está gestionando la importación de oxígeno desde Ecuador. “Hemos contratado 260 toneladas con Ecuador y se está atendiendo a la zona norte del país, básicamente a hospitales de Amazonas, en Bagua y Utcubamba, informó el director ejecutivo del legado, Alberto Valenzuela.

Toda esta situación no solo ha generado la falta de oxígeno, sino también que los precios se disparen y surja un mercado negro que complota con las necesidades de los pacientes.

COVID-19: Se amplía suspensión de vuelos de Europa y Brasil

En esta situación crítica por la pandemia del COVID-19, las autoridades del país ahora entienden que se puede vivir sin oxígeno.